Mira que dicha y que gloria llevo a cuestas,
que por ahora lo único que estoy haciendo es estar sobreviviendo,
y sobreviviendo sin vos.
Aunque realmente ya no te extraño,
y es eso el vacío que me llena.
En qué momento deje de quererte, no?
Te fuiste de la misma manera que viniste.
Siempre creí que iba a ser más compleja la ecuación del amor,
dónde está el verte en todas las esquinas?
No te siento más en el aire.
Ya no te amo, ya no te odio, ya no te extraño,
simplemente, y no lo tomes con rencor, no existís.
De todas maneras,
es más que sabido que todo esto es para mejor,
me tuve que perder un poco para darme cuenta,
(y hasta creí encontrarme en el camino).
Pero por ahora,
voy a seguir sobreviviendo,
sabiendo que siempre aparece algo mejor,
refugiándome en sustancias y pidiendo asilo en otros corazones.
Lo único que aprendí en este tiempo,
es que nadie puede volar por uno.
Y uno no puede volar por nadie.
La vida ya hizo lo que tenía que hacer,
de ahora en adelante,
voy a tirar piedras con los ojos cerrados,
y jugar a la rayuela (que es bastante parecida a la vida).
Si puedo, en algún momento,
voy a llegar al cielo,
pero a mí manera
y a mí cielo.
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